¿Cuanto perdemos por miedo a intentar?

Cómo llamar, a que alguien detenga sus pasos, justo en el momento que te ve aparecer.
Pero, creyendo que mirarte como si no hubiera un mañana, no es lo correcto, de inmediato retome la marcha de sus pasos.
Y tú, pensando que devolverle la mirada es una mala decisión, bajas la cabeza y clavas la mirada al suelo.

Tomar caminos diferentes... 
...deseando caminar juntos.