Desaparecer...


Cuando estás mal y todo lo ves negro.
Cuando piensas que no tienes futuro, que no tienes nada que perder...
Cada instante es un peso enorme, insostenible.
Y resoplas todo el tiempo.
Y querrías liberarte como sea, de cualquier forma... de la más simple, de la más cobarde, sin dejar de nuevo para mañana ese pensamiento.
Y entonces, simplemente, querrías no estar tampoco tú.
Desaparecer.