El silencio es mi mayor cómplice.
Los silencios son mi mayor tesoro.
Cada uno de ellos está cargado de significados, de sentimientos... cada uno de ellos envía un mensaje, aunque a veces bastante confuso, lo reconozco.
Cuando estoy enfadada guardo silencio porque no quiero dañar con mis palabras, o simplemente me niego a rebajarme al nivel de insultar a alguien.
Cuando estoy cansada, el silencio es un imperio porque necesito estar tranquila, relajarme.
Cuando estoy con alguien muchas veces guardo silencio porque quiero disfrutar de esa persona, disfrutar del momento. A veces es una forma de mostrar respeto, dejando de lado un cierto egoísmo.
Pero ante todo cuando estoy con “esa persona” mi silencio implica toda la pasión que puede brotar dentro de mí y que le expreso con mi silencio, poniendo mis otros sentidos en acción para demostrarle que dentro de mí hay un caos por su causa.
Escucho porque quiero aprender, aprender aún más a valorar a las personas, aprender cómo son y lo que necesitan, aprender cómo funciona su mente, cuál es su forma de ser.
Mi silencio entonces se convierte en una expresión sublime de amor... y si hablo mis palabras sonarían rompiendo un silencio, un instante, un momento... no tendrían sentido, ningún sentido.
~CIARA MOLINA~
Los silencios son mi mayor tesoro.
Cada uno de ellos está cargado de significados, de sentimientos... cada uno de ellos envía un mensaje, aunque a veces bastante confuso, lo reconozco.
Cuando estoy enfadada guardo silencio porque no quiero dañar con mis palabras, o simplemente me niego a rebajarme al nivel de insultar a alguien.
Cuando estoy cansada, el silencio es un imperio porque necesito estar tranquila, relajarme.
Cuando estoy con alguien muchas veces guardo silencio porque quiero disfrutar de esa persona, disfrutar del momento. A veces es una forma de mostrar respeto, dejando de lado un cierto egoísmo.
Pero ante todo cuando estoy con “esa persona” mi silencio implica toda la pasión que puede brotar dentro de mí y que le expreso con mi silencio, poniendo mis otros sentidos en acción para demostrarle que dentro de mí hay un caos por su causa.
Escucho porque quiero aprender, aprender aún más a valorar a las personas, aprender cómo son y lo que necesitan, aprender cómo funciona su mente, cuál es su forma de ser.
Mi silencio entonces se convierte en una expresión sublime de amor... y si hablo mis palabras sonarían rompiendo un silencio, un instante, un momento... no tendrían sentido, ningún sentido.
~CIARA MOLINA~